ENTRAׁABLE AMOR DE MADRE
por Rafael T.Pérez
www.kolisraelorg.net
"El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona".
Aristóteles
Ah que cosa más grande es el amor de una madre abnegada, y si esta es "palestina" entonces, sin duda, estamos constreñidos incluso a manifestarle una agradecida devoción tanto más piadosa por considerarnos dignos de ser instruídos en el amor al más puro estilo musulmán. Casi cuatro mil años de judaísmo, dos mil de cristianismo y otros tantos de budismo no representan la esencia del verdadero amor cuyas auténticas formulaciones experimentales emanan de una fuente mayor como es el islam. Si rav Hillel, Jesús, Buda o Gandhi levantaran la cabeza no podrían por menos que quedar anonadados ante tal expresión de amor, gracias al islam ahora sabemos que la mayor satisfacción de una madre que ha dado "mucho" amor a sus hijos, no es poder ver como sus retoños crecen y llegan a ser hombres de bien cuyas vidas se sustentan en valores fundamentales que redunden en beneficio de toda la humanidad, sino en hacerse explotar en medio de "esa" humanidad por supuesto infiel y por consiguiente merecedora de su destino fatal.
Palabra de Corán: "Si no os ofrecen la sumisión (los infieles) ni dejan en reposo sus manos, entonces, cogedlos, matadlos donde los encontréis. Os damos sobre esos un poder manifiesto" 4:93/91 "
No toméis a los infieles por amigos" 4:143/44 "hemos preparado para los infieles un tormento despreciable" 4:150/51 "¡Oh los creyentes! ¡Poneos en guardia! Lanzaos contra nuestros enemigos por grupos o en bloque. Corán 4, 73/71
"La recompensa de quienes combaten a Alá y a su enviado y se esfuerzan en difundir por la tierra la corrupción, consistirá en ser matados o crucificados...esto será en este mundo, en el otro sufrirán un tormento enorme" 5:37/33.
Y si acudimos a la hadith la tradición islámica, todavía es más clara la luz con la que pretenden iluminar al mundo.
Suele decirse que hay gente que está educada para no hablar con la boca llena, pero no les importa hacerlo con la cabeza hueca, y es precisamente aquí donde topamos con la cruda realidad, toquemos la cabeza de Europa toc toc ¿hay alguien?, vaya pues parece que no, aunque de momento no es esta la cabeza a la que me refiero...
- Leemos en el diario español EL MUNDO en su edición del viernes 15 de octubre 2004 en la contraportada, la sección "El zoo del siglo XXI" un artículo que concluye en la pág 29 escrito por Beatriz Oberlander corresponsal de ese periódico en Israel. Una interesante y demostrativa entrevista nada menos que a Um Nidal -la mama de Nidal- de lo que significa para ella el amor de madre. O por lo menos del tipo de amor del que la cultura islámica está imbuída.
Empezamos bien: "Una mujer muy admirada por las mujeres palestinas seguidoras de Hamas, Mariam Farhat de 55 años, ya ha perdido a dos de sus diez hijos por la causa palestina y se declara dispuesta a que todos los demás (los otros ocho que le quedan) se suiciden" "Ofreceré sin dudar a todos mis hijos". Las joyas ausentes de la familia cayeron de la siguiente forma, el primero mientras preparaba un atentado y el segundo asesinando a 11 israelíes, continúa la entrevista afirmando que enseño a sus hijos desde que eran muy pequeños a "amar" la yihad, inevitablemente me surge una inquietud, ¿por qué no manifestó ella el mismo tipo de amor antes de inculcárselo a sus hijos?, ahora mismo ni estaría lamentando la pérdida de dos de ellos ni estaría preparando al resto para convertirse en despojos inmorales de la humanidad, pues de acuerdo a sus palabras no solo les inculcó ¿o habría que decir impuso? el ser terroristas sino el desearlo.
La señora Oberlander nos dice en su entrevista que la tal Farhat es una mujer "inteligente y culta" debe ser que ha convivido con ella para estar convencida de ello porque más vale parecer un idiota con la boca cerrada, que abrir la boca y disipar toda duda. Luego de haber leído la entrevista el lector puede convencerse del gran nivel intelectual de la señora Farhat, la verdad es que lista es un rato, ella sigue viva mientras dos de sus hijos están muertos y al resto les espera la misma fortuna gracias al afecto maternal que les profesa.
Ni en el mundo animal los irracionales advierten un comportamiento semejante con sus cachorros, a quienes sus padres no solo les procuran evitar toda suerte de desgracias, sino que no los empujan a cometer actos infames. Por la observación entendemos que en el mundo animal hay más cerebro que en algunos colectivos humanos. Así que podemos derivar que el sentido común es el menos común de los sentidos.
Que se dejen de milongas y farfallas, que si el climax paradisíaco del Valhala islamista se obtiene mediante actos de terror ¿por qué no se matan los inductores y dejan en paz a los ímprobos inducidos? Sin duda será porque cuando el filósofo señala la luna, el tonto se fija en el dedo.
La mama de Nidal afirma que "Les he dado a mis hijos amor y les he enseñado a amar a Alá con todas sus fuerzas y a morir por el islam" Estoy haciendo memoria y parte de esta proclama me es muy familiar, es muy similar al más grande mandamiento de la Torah: "Amarás a Hashem tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, y con todas tus fuerzas..." pero en la versión musulmana echo de menos la segunda parte judía la cual nos enseña que: "Y A TU PROJIMO COMO A TI MISMO" esto es amor en estado puro, todo lo demás el resultado de la invectiva de mentes abyectas nutridas por el odio.
Cualquier padre y madre con verdadero corazón y a quienes su hijo les dijera "padre, me voy a matar a cuantas personas me sea posible" no solo intentarían por todos los medios posibles persuadir al hijo de lo infame de su deseo, sino que, si son religiosos, elevarían sus plegarias para que su hijo no consiguiera su monstruoso afán, y en última instancia, cuando toda solución fuera imposible, unos padres verdaderamente justos rogarían para que el hijo amado fuera la única víctima y no fuera capaz de cumplir tan trágico objetivo.
Pero este no es el corazón de la señora Farhat ni de las muchas Farhat que viven en todo el mundo islámico, el hijo le fue a contar a su "mama" que iba a matar judíos y ella con el amor que la caracteriza le dijo "no dudes y no tengas miedo, no te distraigas hasta haber cumplido tu objetivo" (hoy matar judíos, quizá mañana europeos )ellas cuando elevan sus plegarias a Alá lo hacen con un deseo muy diferente: "Yo recé todo el tiempo, y le pedí a Alá que Mohamed lograra alcanzar su objetivo y se convirtiera en martir" Eso es un regalo para Alá, dice ella.
Lo que nos lleva al factor de futilidad de Murphy cuando demuestra que ningún experimento es un completo fracaso; puede siempre servir como una mal ejemplo, y desde luego lo es, puesto que si una potencia celestial o un dios, o incluso en el D-s en el que creo, se me apareciera mañana y me dijera que para alcanzar el "paraíso" estaba obligado a matar a mi prójimo o a cien de mis prójimos, judíos, árabes, africanos, europeos o lo que fueren, simplemente le diría lo que Hernan Cortés al rey de España cuando le dio una orden poco clara: "Hágase la voluntad del rey, más no se cumpla" e inmediatamente me alejaría tan lejos como me fuera posible de ese dios, potencia o cualquiera que fuere su identidad espiritual.
La entrevista que la señora Oberlander publica en el citado diario, aparece en una sección que los editores denominan el zoo del siglo XXI, y tiene que serlo puesto que para aparecer en esa sección se ha de pertenecer al mundo de los especímenes no recomendados. Zoo del siglo XXI o lo que es lo mismo y mucho más castellano, "Animalario del siglo XXI" en este caso acertadamente.
No sería de extrañar que para cuando Europa reaccione frente al terrorismo musulman, ya aparezca en los diccionarios y Enciclopedias dedicadas a la investigación biológica una nueva especie que con todo merecimiento, tendrá el triste honor de compartir lugar entre hienas, tiburones, tripanosomas y demás alimañas y virus con el sugestivo nombre de timororis islamicus palestinensis, depredador sin escrúpulos que no solo hace predación sobre los demás que no son de su especie sino que contra todo pensamiento racional es capaz de matar a sus propios hijos.
Quizá dentro de cien millones de años (en la escala evolutiva) los paleontólogos de entonces extraigan de la tierra dos cráneos huecos, el de un torpitudinis europeus y el mencionado timororis islamicus palestinensis, ambos ostensionados en un mismo estrato, y de ambos, los citados científicos, obtendrán una verdad irrefutable, que mientras el primero carecía de ojos para ver la realidad, el segundo carecía de cerebro con el que habría evitado ser engañado.
¿Podemos revertir la maldad del perverso? que triste que la única alternativa que se nos impone es combatirlo en lugar de construir juntos un mundo mejor.